José Leirós de Osun

TRADICION

Batuque religión animista, nación Yorubá pre-faraónica

Orixás y ceremonias de la tradición sagrada

Muchos han sido los historiadores que estudiaron los cultos afro en América, procurando algunos desvincular la cultura africana del sincretismo católico y la superchería en la cual fueron sumergidos nuestros directos predecesores.

Bajo la tan benévola protección de la madre Iglesia nuestros hermanos que llegaron a América debieron sincretizar a sus orixás con los santos del panteón católico, para así poder dar curso a su antigua y muy cierta fe espiritual. Ese sincretismo se debió adoptar porque el negro tuvo que ser más astuto, porque en Haití, Cuba, Brasil de mediados del siglo XIX, estaban impregnados de la corriente ideológica de Europa que es ese momento era en positivismos, donde la fuerza era de corriente cartesiana y aún cargando con las ideas aristotélicas que aceptaban la esclavitud, o más cerca aún, cargando con los conceptos de Fray Bartolomé de Las Casas que pidió esclavos a Carlos V o Santo Domingo de Guzmán que decía que por designio divino era normal que existiesen hombre libres y otros no, y que el esclavo debía atender a su amo, así llego el negro africano a América. Aquel negro que cultivaba su tierra y adoraba a su orixá en la tranquilidad de la selva tropical que se había visto beneficiado de que los centros de poder y culturales del norte no habían tenido contacto directo con ellos, lo que les permitió mantener sus estructuras sociales y culturales intactas durante mucho tiempo.

Bará Elegbá, en Oios, Nigeria.

Porque creemos que nosotros estamos en el camino de la verdad tratando de mantener viva la tradición yoruba, se dice que las tribus yorubas tienen un origen Sudan y nadie puede decir hoy que el Sudán no existe-, (Sudán antes de transformase en un país, el término significa “faja de tierra al sur de Sahara”). Si hablamos del Sudán debemos hablar del Homo Erectus descubierto por el científico Leake en Oludwai (Tanzania), toda esta zona forma parte de lo que fue la antigua cultura egipcia, la religión de la región previa al primer imperio egipcio. Esta religión era de carácter animista; animismo según la definición presentada por Burnett Tylore “doctrina que considera al alma como principio vital”.

En la naturaleza existe un espíritu el cual es preciso adorar a fin de aplacar y calmar sus iras. Posiblemente esta fue la base de las religiones más primitivas en el globo terráqueo, teniendo dicho animismo como su máximo exponente al Sol, poder creador masculino, a la Luna poder creador femenino. El animista africano cree que nada muere sino que todo se transforma, que la materia muere pero el ser es permanente, y que vuelve a transformar en otro y así sucesivamente.

La cultura yoruba es anterior al primer imperio egipcio, se tiene conocimiento de esculturas y construcciones que puedan datar de más de siete mil años, (tomar en cuenta que el  pueblo judío está en sus cinco mil setecientos cincuenta).

En las  márgenes del río Níger se desarrollan los reinos yorubas, con un largo pasado histórico. Se supone que la gran nación yoruba deriva de dos grandes grupos: un ramal indígena nativo de esas latitudes el cual centraba su reino en la antigua ciudad de Ilé-Ifé, que debe haber sido conquistada en algún momento por el legendario Oduduwa, que es ampliamente conocido como el fundador de la nueva dinastía de los yorubas, o más bien, que unificó los reinos y les dio el carácter de una gran nación.

Incorporación de Xangó.

De la figura de Oduduwa le suceden sus hijos que se desparraman en el territorio yoruba y fundan otros estados con sus reinos, siempre respetando la casa real de Ilé-Ifé. Al este fundar Ujexa, Ekiti, Ondo y Keto, Egbado al oeste. Fundan Oyo al norte e Ibeju al sur. La historia cuenta que a Oduduwa en Ilé-Ifé lo sucede su hijo menor llamado Oranmiyan que fue un gran estadista y fundador de la dinastía reinante en Oyo.

Durante su reino la nación yoruba llegó a su máximo esplendor en unificación y progreso social, los cultivos eran mejorados y las normas de políticas interestatal así como la organización del estado, fue modelo y ejemplo para muchos reinos posteriores.

La nación yoruba por su organización política y social y por la astuta forma de unificación en una lengua común, se convirtió en la regente y dominante de la zona en las márgenes del Níger, expandiéndose al este y al sur, imponiendo su lengua, gobernando políticamente pero no despojado a los moradores de las tierras conquistadas, respetando al dueño del ámbito o sea a los orixás de los conquistados, pero imponiendo como superior a los orixás propios.

Existe un investigador sudamericano que afirma que los pueblos yorubas son eximios descendientes de los moradores de las tierras en lo que él dice fue el período prediluviano.

Esto, si aceptamos que la teoría del diluvio fue, pero esto no se explica religiosamente porque una explicación religiosa sería débil, pero los científicos tienen argumentos bastante sólidos para afirmar.

De lo que no podemos dudar es que estamos frente a una religión que data desde los comienzos de la humanidad, que tenemos un parentesco con los animistas egipcios que también cultivaban a sus ancestros y que debemos rescatar nuestras raíces y quebrar los sincretismos y salir a la luz de los conocimientos, tirando por tierra el paternalismo de cualquier religión que tenga unos cuantos siglos en el mundo y no sea tan antigua como la nuestra.