¿MURIO EN LA CRUZ?
La otra historia de Jesús
La solución del enigma puede estar en una tumba celosamente custodiada
Se han renovado en las últimas semanas las investigaciones acerca de la verdadera historia de Jesús. Importantes expertos están afirmando que Jesús no murió en la cruz y que de ello dan testimonio varios de sus descendientes actuales . Lo que sigue es una crónica sobre esa posibilidad, elaborada en base a datos suministrados por indagación realizadas en varios países durante muchos años.
Las
actuales investigaciones acerca de que sucedió realmente con Jesús, se basan
en un minucioso trabajo realizado por el experto español Andreas Faber-Kaiser,
licenciado en filosofía y letras y autor de varios libros: Faber-Kaiser indagó
los hechos en los mismo lugares en que se registraron y llegó a la conclusión
de que Jesús escapó con vida a la tortura que le infligieron los romanos y
logró refugiarse en Cachemira, donde constituyo una familia, tuvo varios hijos
y murió a edad avanzada.
Según
Faber-Kaiser, Jesús rescatado de la cruz y luego que se recuperó de sus
heridas huyó hacia el este en busca de los pueblos perdidos de Israel y llegó
a Cachemira, donde inicio una nueva vida. En Cachemira, sostiene el
investigador, existe unas serie de nombres toponímicos que dan fe del paso de
Jesús por esa región.
En
efecto, Pilato permitió que Jesús fuera retirado de la cruz mucho antes de que
su muerte estuviera plenamente confirmada, posibilitando así su salvación,
dice Faber Kaiser.
Faber
Kaiser señala que Jesús no permaneció muchas horas crucificado y, gracias a
la ayuda de Pilato, fue bajado de la cruz en la tarde del mismo día en que fue
dictada y ejecutada la sentencia de muerte. Este, según Faber Kaiser, es un
hecho muy importante, ya que de acuerdo con las crueles costumbres de los
romanos, la crucifixión tenía el objetivo de causar la muerte del condenado
luego de varios días de suplicio y no inmediatamente. Las muertes por crucifixión
se producían por hambre y des, después de tres o cuatros días de torturas,
durante los cuales los condenados permanecían clavados a la cruz, desangrándose
lentamente.
Faber
Kaiser subraya:”Evidentemente Pilato no deseaba la muerte de Jesús. Pero los
judíos declararon a Jesús un rebelde, que deseaba llegar a ser rey.
Advirtieron a Pilato que si le dejaba libre sería él desleal al César. A
Pilato, que no se podía jugar su alto cargo, y al que no convenía en modo
alguno la enemistad del César al que los judíos habrían avisado
inmediatamente en caso de que hubiera dejado libre a Jesús, sólo le quedaba la
opción de ajusticiar a Jesús de tal forma que, aparentemente muerto, pudiera
sin embargo seguir con vida. Así, fijó en primer lugar la crucifixión en un
viernes, a pocas horas de la puesta del sol y a punto de caer la noche del gran
Sabbath. Especulaba Pilato con que, de acuerdo con las leyes judías, el cuerpo
de Jesús no podían permanecer en la cruz después del anochecer, porque
durante el Sabbath no se permitían las crucifixiones. Y así fue: Jesús fue
bajado de la cruz antes de caer la noche. Y es improbable que, mientras los dos
ladrones que fueron crucificados al mismo tiempo que Jesús, estaban vivos en el
momento de quebrarle las piernas los soldados, Jesús hubieran ya muerto. También
en el instante preciso, aparecer en escena un hombre llamado José, declarado
amigo de Pilato y persona notable de la localidad, discípulo secreto de Jesús.
Este hombre se lleva el cuerpo de Jesús a un lugar en el que los judíos no tenían
nada que buscar”.
Bajado
de la cruz, Jesús fue “sepultado” en una especie de “tumba” donde fue
curado por su amigo. En realidad, el “sepulcro” era una enorme caverna, según
los indicios recogidos por los investigadores. La “tumba” de Jesús no fue
rellenada con tierra, tal como ordenaban las costumbres de la época, sino que
simplemente fue tapada con una roca. Esta roca podía moverse con facilidad y así
quedaba libre la entrada y la salida. La “tumba” era tan espaciosa que, que
según el propio Evangelio de San Marcos (15, 47-47, 16-17), María Magdalena,
María y Salomé entraron en ella.
Una
vez curado de sus heridas señala Faber Kaiser Jesús huyó disfrazado y
emprendió un largo viaje que culminó en Cachemira, donde finalmente murió
cuando ya era muy viejo. Según la Biblia subraya Faber Kaiser, Jesús fue vivo
por María Magdalena, Santiago y Pablo, quienes estuvieron con él
inmediatamente después que, ya curado, salió del “sepulcro”. Llegado a
Cachemira luego de un largo y peligroso viaje. Jesús se unió a una mujer con
la que tuvo varios hijos. Estos hijos, a su vez, engendraron una numerosa
descendencia, según ha confirmado el profesor
J. Hassnain, una de las más importantes autoridades en esta materia.
Uno
de los descendientes directos de Jesús señala Faber Kaiser es Sahibzada
Basharat, quien ha suministrado importantes datos sobre esta historia. Faber
Kaiser habló largamente con el profesor Hassnain y con Basharat y escribió lo
siguiente:
El
señor Sahibzada Saleem nos recibió en su casa de Srinagar. Aficionado a la
fotografía, apasionado de la pintura, poeta, es una persona de una sensibilidad
poco común.
Sahibzada
Basharat Saleem es hijo de Sahibzada Ghulam Mohiyuddin, que a su vez es hijo de
Sahibzada Abdul Ahad, hijo de Sahibzada Vaduz Samad, hijo a su vez de Sahibzada
Abubekr. Y así, siguiendo una larga lista, el señor Sahibzada Basharat Saleem
conserva en Srinagar, Cachemira, el árbol genealógico completo de su familia
desde Jesús hasta él, Sahibzada Basharat Saleem, descendiente vivo, hoy del
Mesías.
Viene
el caso aquí otra vez el antiguo libro de historia persa, el Rauzat-us-Safa, ya
mencionado con anterioridad. Si bien no parece ser que su texto guarde relación
con estos descendientes de Jesús que acabamos de ver, sí se cita ya allí el
hecho del casamiento de Jesús que acabamos de ver, si se cita ya allí el hecho
del casamiento de Jesús. Leemos literalmente. Se dice que después de su
descenso del mundo superior, Isa (Jesús) vivirá 40 años más, se casará,
tendrá hijos, combatirá a los enemigos de los musulmanes y exterminará a
todas las naciones que sigan otras religiones.
Debo
mencionar además aquí que el padre de Sahibzada Basharat Saleem, así como su
abuelo, eran hombres admirados y recordados en Cachemira por sus excepcionales
dotes paranormales de curación. Sahibzada Basharat Saleem, que es hombre por
todos conocidos en Srinagar, nos contó que cierto día un hombre, al saber de
quién era hijo, se arrodilló ante el y le contó lo siguiente acerca de su
padre:” el hombre tenía un hijo que estaba gravemente enfermo. Los médicos
ya no podían curarlo. Entonces le pidió consejo a su padre. Este le dijo que
oraría por él; le dijo que fuera a su casa y orase también. A punto de morir
el muchacho, de repente a medía noche pidió leche y por la mañana estaba sano
y se levantó”.
Estos son algunos indicios que permiten asegurar que Jesús no murió en la cruz, según los investigadores. Faber Kaiser aseguro que en Srinagar, capital de la entonces Cachemira, se encuentra actualmente la tumba de Jesús y de su madre María, quién acompaño a su hijo en el viaje hacia Cachemira pero murió antes de llegar a destino. “La tumba de Jesús señala Faber Kaiser –es celosamente custodiada desde hace 3 mil 500 años por una comunidad de judíos que conocen el secreto.