COMO HOMBRE Y ENTRE NUBES, EL CRISTO DESCENDERA

El Cristo se ha ofrecido y viene,
en los momentos de más indescriptible dolor.
Cristo, es el Hijo que vengo anunciando,
después de una Noche tenebrosa que habrá,
El viene, como a cubrirlos con un manto,
y a darles luz, paz, amor y serenidad.
Viene con una fuerza inmensa
y ustedes con El a colaborar,
para dar también de esa luz que la Humanidad recibirá.
Cristo has pedido, mi Carmen, Cristo pronto pisará,
viene por este suelo, todo será bendecido,
no un sitio preferido, porque el mundo entero por igual.
Es la Tierra, la que anuncio, que luego, toda se verá,
como en un jardín, como en una primavera,
cual nunca adornada estuvo, y en ese entonces, estará.
Cristo, preguntaste, mi bienamada,
desde lo alto, y entre nubes descenderá.
Como Hombre se ha ido, hace casi dos mil años,
y como hombre retorna y a todos viene a abrazar.
Respira, sonríe y ama y todos se identificarán,
como en un solo ser, como en un solo latido,
pero con la inmensidad del amor,
de la humildad, de la divinidad y del olvido.
Olvido del que te hirió, olvido del que te ofendió,
mas olvido de la herida y de la ofensa,
pero no de ese Hijo Mío,
porque vuelve arrepentido y lo abrazas y das tu perdón.
Amén

LAS NUBES LO CUBRIERON Y LO VUELVEN A TRAER

Los milagros que habrá en el mundo,
representados en esto, hijo, están.
Que nada se perderá y llega el momento oportuno,
que cada uno su dosis de dulzura la recibirá.
Representando en las aves, que vienen allí a beber,
solamente una gota les basta, como esa gota de miel.
Que fueron elementos de tortura, mas destruidos jamás,
porque el mundo no se destruye, sino está en la purificación total.
Por lo tanto, bien amado, ¿ves lo que hay que realizar?
Lo que fue torturador, transformarlo en mansedumbre,
en paz, y conferirle también el Alto Honor.
Alto Honor, sí, mi Mario bendito,
Alto Honor del Cielo, que a la Tierra envolverá,
estás tú y estarás junto al Cristo,
porque El ya ha llegado a la Tierra,
pero pronto comienza a manifestar.
Y ¿se dice que viene en las nubes?
Pues en las nubes, ¿recuerdan cómo fue?
Se elevó, y las nubes lo cubrieron,.
y lo vuelven a traer nuevamente, mi bien.
Pero está en el mundo,
pues ha pedido padecer con todos hasta ese final,
ese final del dolor, almas mías,
porque es nuevamente elevado,
para el descenso, tal como anunciado está.
Y entonces comienza la paz,
la armonía y el amor,
comienza la serenidad, la dulzura,
el estremecer de la Tierra desde lo profundo,
como entrañas de una madre que da a luz,
y nada será destruido, sino transformado,
porque no soy un Dios destructor, sino Padre y soy Amor
Por lo tanto, hijos míos,
a ustedes encomiendo junto al Cristo esta obra,
porque ustedes estarán junto a El, el Redentor.
Amén

Montevideo, 15/11/97

SE FUE EN UNA ESTRELLA Y ASI VOLVERA

Cada uno llevó un pimpollito. También vamos a pedir una Bendición.
Aniversario compartido.
Ahora, mi Señor, esperamos Tu Palabra.

Aniversarios compartidos, dice EL,
sí, aniversarios compartidos, pero ya no es el decir,
esta fecha es la importante y el otro....
No, ya llega el día tan ansiado, tan señalado.
Y en estos aniversarios, qué hermoso es compartir,
es rodear a aquel ser, no solo por un momento,
sino por siempre y que no tenga que gritar:
¡Socorro! ¡qué pasa! ¡qué caos, qué confusión!....
que me siento en un tembladeral.

-¿Vas comprendiendo, Mabel?
-Sí.
-Mi Señor....

Cuántos de mis hijos se sienten igual,
como en esa súplica y en ese clamar.
¡Socorro, sí, socorro!, ¿cuándo es?
Pero ya no deben temer, las aguas vuelven a su cauce normal,
pero habrá algo tan trascendental
que el mundo entero se va también a conmover.
Pero la conmoción será también de emoción y felicidad.
No teman, almas mías, no teman, Tiempo de los tiempos es,
tiempos en los cuales todo esto que se está cumpliendo fue anunciado.
Y YO como Dios y Padre estoy en cada hijo,
no me aparto de ningún lado,
cuando señalan a aquél, qué está haciendo,
cuando mi Jesús dijo: guerras, cuántas veces he dicho,
sabía que mis ángeles se ofrecerían para estar en las partes opuestas,
pero en la parte divina el ángel que está en cada ser
siempre está en un abrazo.
Hijos, no deben temer.
He repetido una y otra vez, no soy verdugo ni juez,
Soy Padre, estoy en cada hijo,
y este es tiempo que han comenzado milagros,
pero pronto y a través de ustedes...

Mi Señor, pero dices ustedes y me muestras tantos más...

Sí, los milagros serán multiplicados
y la Tierra no fin del mundo como tantas veces mencioné,
sino fin del dolor y de la destrucción.
Los amo, y digo: bienvenidos, dejaron aquella parte del cielo
para compartir, por esto tanto han sufrido.
Pero estamos en el tiempo, después de la amargura,
la dulzura en cada paladar.
Sí, y en las dulzuras, llega el corazón,
el corazón está abierto, porque llega de otros sitios,
no es que ustedes lo estén absorbiendo.
No, almas mías, no, vuelvo a reiterar,
adelante, sin temor, no van a sucumbir,
con estos cuerpos lo van a vivir.
Este es el Tiempo de los tiempos,
tal como mi Jesús lo profetizó,
el tiempo que El viene, como hombre se fue, como hombre regresa.
Se fue en una estrella y en una estrella vuelve,
pero vuelven muchas más
y mis ángeles en ellas para unirse a mis ángeles de acá,
para colaborar en un abrazo tan apretado,
que ya nadie temerá jamás.
Pero, mi Palabra va a continuar,
ahora, un momentito nada más
y luego más cositas, Papá les dirá.
Amén

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