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GRANDES MILAGROS,
SERES DORMIDOS DESPIERTAN (Pág. 2)


EL TESTIMONIO DE LOS RESUCITADOS
CRISTO DARA NUEVA VIDA A ARTIGAS Y A SU CABALLO
MAS LUEGO... SERA REDIVIVO, EL ARTIGAS QUE PRESENTE



Montevideo, 08/10/88

EL TESTIMONIO DE LOS RESUCITADOS

¿Qué es lo que voy a decir?
que cercano está el momento que todos comprenderán,
que no soy un Dios que mande a tormentos,
sino un Padre que a todos al Cielo llevará,
y pronto lo podrán comprender,
el porqué de lo que se conoce como Pecado y el Dolor.
El porqué de todo mis hijos bien amados,
y todos se sentirán tan unidos,
y en esa unión tan apretados,
en ese abrazo que les prometo,
no olviden que se verificará,
que se acercan los gloriosos momentos
de la unión de toda la Humanidad.
Que si se ve descarriada, despavorida, hambrienta,
desolada, frustrada.
Y el odio diseminado en esta Tierra que está asolada,
más no teman que vientos no habrá,
no teman que las aguas se retirarán,
no teman que la Tierra florecerá.
Todo lo que prometo, todo cumplido estará.
Benditos, bienaventurados míos,
ninguno fuera de estas palabras y sentimientos quedará,
benditos, los he creado en el Cielo,
vinieron a padecer los tormentos,
pero fue a vuestro pedido, lo vuelvo a reiterar,

que no quería YO esto.
Y ustedes dijeron: sí, iremos allá,
eran fuertes, eran vehementes.
Y hubo una razón poderosa para dejar allá
las alas y la divinidad y venir todos juntos.
En lo humano se enfrentan y se odian,
y en el alma se aman eternamente y se piden perdón.
Pronto comprenderán mis Palabras,
pronto, porque el alma dará al cuerpo todo el gran conocimiento,
que habrá discernimiento, que habrá una superación,
que aquel que dio la espalda,
de frente por fin estará.
Y en lo humano dirá: ¡perdón!
Qué abrazos, abrazos y más abrazos habrá.
Y YO multiplicado como soy en todos los brazos estaré,
para abrazar con ese infinito Amor
a ninguno la espalda ni di, ni doy, ni daré.
Siempre de frente a cada hijo.
Y si alguno no me puede ver,
es que estoy a la espalda de él
para poderlo abrazar y guiarlo
como si fuera pequeñito.
Tanto se tuvieron que caer,

tantos rodaron, tantos están en tormentos,
como seres que tengo aquí a mi lado.
Pero no teman, reitero, que todo aclarado será.
Tormentos como tormentas, como si fueran de verano
que rápidas pasarán, dejando un Cielo resplandeciente
y un sol que viene a alumbrar.
No un sol quemante de verano, sino
de caricia suave como un beso que todos recibirán.
Los ojos se abrirán...

¿A qué te refieres? los que partieron, mi Señor, o los que están ciegos?

Hay distintos tipos de ceguera -dice EL­
pero todas las cegueras se transformarán,
en una visión y gracia tan plena,
porque los ojos del alma se manifestarán
en los ojos corporales.
Y aquellos otros que están dormidos
que parecen de Eternidad,
cuántos saldrán de esos encierros o lugares sombríos
y nuevamente su carne tornará,
para dar testimonio sublime,
para poder decir: no temas, con esa dulzura,
no temas que estoy acá.
y los seres que los habían llorado
se sentirán renovados diciendo:
el milagro se realizó, como el Lázaro de la antigüedad,
también te puedo abrazar,
porque también eres tú parte de nuestras vidas.
Cuántas madres, cuántos hijos, cuántos hermanos
podrán abrazar, aquellos que no se han ido definitivamente,
si no solamente están esperando el momento
de poder por fin retornar.
Recuerden, no solo lo prometo,
recuerden que lo cumpliré,
como he prometido o he dicho tantos hechos,
y se han ido verificando en los tiempos.
Recuerden hijos míos, en la mente, por la memoria

y en el corazón por el Amor,
que todo será cumplido,
qué gracia plena, qué Alto Honor.
y nadie sentirá orgullo, al contrario,
en cada instante mayor humildad.
Qué ejemplo sublime darán al mundo,
que irán rescatando de lo más oscuro
y de lo más impuro y sin embargo,
con qué dulzura, con qué fuerza de Amor
y con esa Humildad que acabo de mencionar,
que ninguno se sentirá orgulloso diciendo:
cuánto pude salvar yo, no.
Dirán: cuánto más puedo hacer, qué poco hice hasta acá,
cuánto más, hijos míos van a real izar,
cuánta obra con el Cristo o el Mesías como le quieran llamar,
todo será renovado, a nadie en ningún rincón dejarán.
Aquel que está tan emporcado, que ya no es lodo,
sino es estiércol que está totalmente cubierto.....
no sentirán repugnancia cuando lo vayan a besar,
porque sabrán que vuestro beso es tan puro
que el ser limpio al instante quedará.
Y así irán transformando, maravillas que se obrarán,

digan a mis hijos que no soy el verdugo,
sino el Padre que va compartiendo todos los infortunios,
que soy Dios, Creador, sí, pero soy el Infinito Amor,
no lo olviden,
que pronto comienza el Divino Sonreír.
Amén


Montevideo, 25.09.84

CRISTO DARA NUEVA VIDA A ARTIGAS Y A SU CABALLO

Aguardando como siempre, Mi Palabra, almas mías, están,
porque hoy estuve silencioso y no quería hablar,
porque hoy guardé silencio y Ella tanto me pidió
que diera de esa Palabra y orientara a esos hijos
en ese traslado, traslado de horror.

¿Por qué, mi Señor?
Ya lo comprenderán, por eso también callé,
pero ellos volverán y acá, almitas mías, hallarán felicidad.
Ustedes están preparados y dispuestos para todo están,
mas también por este lado aguarda un momento difícil por el que hay que pasar.
Primero será el momento y luego....... la Gloria triunfal.
Habrá también una resurrección de alguien que partió hace un tiempo ya.
Habrá una resurrección y el tiempo, aunque largo para el humano parezca ser,
digo YO, hace un rato, almas mías que ese ser partió.
Amén


Pero, Señor, yo te voy a preguntar: TU en un momento me mostraste alguien que partió hace poco como dijéramos hace un rato y alguien que partió hace mucho... y me mostraste a Artigas............ ¿qué representa? Artigas que volvió en otro hijo, en otro retorno, en otro ser, ¿cuántas veces? Sólo TU lo sabes.... Pero también, mi Señor ¿qué significa?
Un día te mostré cómo Artigas caerá
desmoronado del monumento con su caballo y se destruirán,
pero también te mostré cómo el Cristo levantará sus manos
y nueva vida el caballo y el noble Artigas, vida nuevamente tendrán.
Y enarbolando su espada y en un arranque verán,
en una marcha moderada, pero será una marcha triunfal.

¿Símbolos, mi Señor?
Realidad y Divino Amor
¿Cuánto falta, mi Señor?
El tiempo es este, el presente de rápido que vendrá.
¿Tiempo presente me dices?
Tiempo presente lo es. No temas, todo ha llegado de rápido que lo presentaré.
Pero TU eres de Eternidad, mi Señor, ¿qué es tiempo presente para TI? Para nosotros los humanos, ¡cuánto! cuánto habrá aún que aguardar.
No te impacientes y verás.
Tiempo presente ya es. Lo prometo.
Digo presente y así ya lo cumpliré.
Amén


Montevideo, 11.09.84

MAS LUEGO... SERA REDIVIVO,
EL ARTIGAS QUE PRESENTÉ


Bendecidos están por siempre,
bendecidos por siempre están,
que todo lo cumplo, hijos,
todo cumplido será.
Que lo que presenté en un Mausoleo,
donde unos restos están,
también serán confundidos,
por el derrumbe que habrá.
Mas luego será redivivo...
el Artigas que presenté,
ahora está en un material, y luego.
.. en un cuerpo celestial,
-dice EL-
Con su caballo muy brioso,
para una justicia que se implantará,
todo será, almas mías, cumplido,
porque la justicia, es amor,
es sembrar paz, es extenderse las manos,
es el apretón triunfal,
que no habrá jamás discordias,
ni fuera ni dentro del hogar,
es sentirse todos hermanados,
porque la justicia, de Cielo siempre será.
Amén


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