Madre Esmeralda VOZ DE DIOS

MENSAJES DIVINOS:
15. QUIENES SON, PORQUE VINIERON

“Pequeña gracia'', pidieron...
gracias inmensas mis hijos son,
gracias inmensas que vinieron desde el Cielo,
a pasar en todos los momentos,
por todas las situaciones, por todos los tormentos.
Son gracias inmensas,
que pronto la Tierra de ustedes también las recibirá.
No soy verdugo, ni juez,
soy el Papá que junto a cada uno está,
soy el Ser que más los ama,
el Ser que en el Cielo los creó,
estando siempre junto a cada uno,
multiplicado estoy por infinito amor.
No piensen que ahora estoy acá,
y los demás hijos ¿qué?
Estoy en todo lugar,
en el mar, en los barcos que se hunden,
en esos hijos míos que perecen allá,
con ellos perezco Yo también,
aquellos en los bombardeos,
y aquellos de hambre o de sed,
estoy en cada uno de mis hijos,
pero ellos también fueron gracias inmensas,
que también por ustedes se ofrecieron.
No olviden que vuestras almas son las eternas,
vuestras almas han estado vestidas de tantas maneras,
y también vuestras almas,
cuando tuvieron que quitarse unas ropas,
como las que ahora tienen,
en unos momentos también fueron en el mar,
y en otros momentos perecieron por sed,
en otros por atroces tormentos.
Pero el alma siempre vive,
porque el alma fue un ángel que salió del Cielo,
para venir a compartir todo,
y tampoco llegar a ser juez.
Ninguna quiere juzgar a ningún hermano,
en lo humano, sí, así es....
y sin embargo en lo divino,
se están pidiendo constantemente perdón.
Se ofrecieron por amor, se consagraron,
y está el último acto, el último paso,
y el último es el más amargo.
Y no está en ustedes,
ustedes ya lo dieron en otros tiempos,
almas mías, ángeles divinos, partecitas de mi Corazón.
Así como les hablo siempre,
Soy Dios, Soy Padre,
no soy el cuco que devore a los hijos,
no soy el juez que está condenando,
sino que Soy el Padre que siempre los está abrazando.
Y no olviden que aquél que Me abofetea,
su alma Me pide desgarradoramente perdón,
pero digo: continúa, hijo, si este es tu cumplimiento,
si Yo sé que a nivel de Cielo nos une el más grande amor,
cómo voy a sentirme mal...
Tus palabras, aunque sean en otros para herirme,
tus palabras para Mi siempre son una bendición.
Y así le hablo a cada hijo como el Padre que soy.
Si no actuara de esta manera,
no merecería ni existir siquiera,
ni existir en un Cielo donde Yo pudiera estar,
el Cielo solamente para ustedes....
Pero no es así, el Cielo es para todos.
Les di poder, les di divinidad, fueron hechos con amor,
y son amor que en la Tierra se arrastraron tantas veces,
pero pronto sentirán,
que la gracia y la gloria todo lo envolverá.
Pequeña gracia...inmensas gracias,
y con las obras que pronto realizarán,
irán comprendiendo rápidamente,
quiénes son, porqué vinieron,
pero orgullo no habrá en ninguno,
solo la tranquilidad de saber,
que la obra y el sacrificio no han sido jamás en vano,
sino por el contrario, lo han hecho por otros hermanos,
para que ninguno se pudiera perder.
AMEN
(19/06/93)

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